Absolutamente cierto. Las compras de unidades productivas de empresas en concurso se hacen por importes ventajosos. Resulta mucho más barato comprar una empresa que constituir y crear una nueva.
Aprovecha las oportunidades de adquirir la unidad productiva, con sus activos, maquinaria, concesiones …
Olvídate de las deudas tributarias o de las acumuladas con los proveedores anteriores a la adquisición.
Sólo tendrás que hacer frente a la deuda laboral, pudiendo negociar la forma de pago.
La ley concursal ofrece facilidades para la compra de empresas concursadas, sus unidades productivas y sus activos. Estas empresas son una muy buena oportunidad para emprendedores que parten con la ventaja de adquirir una empresa ya en funcionamiento que, debidamente redimensionada y bien gestionada, hacen de una pequeña inversión inicial un negocio en funcionamiento, con una red de proveedores y clientes ya creados.
También es una posibilidad para los propios trabajadores e incluso para competidores que pueden hacerse con una mayor cuota de mercado. De estas operaciones salen asimismo beneficiados los proveedores y clientes críticos que pueden asegurarse la continuidad de la empresa.
En Legalki somos expertos en asesorar a inversores y empresas en procesos de adquisición de unidades productivas de sociedades en concurso de acreedores, obteniendo la compra en condiciones ventajosas de precio y minorando los riesgos respecto de las deudas de la misma hasta su mínima expresión.
Si tienes pensada la adquisición de una unidad productiva o una empresa y quieres conocer qué fórmula legal se adapta mejor a tus necesidades contacta con nosotros.
Y además de remitirte nuestro presupuesto, valoraremos conjuntamente la estrategia que mejor se adapte a tu objetivo.
Sólo en aquellos casos en que sea preciso y con un claro objetivo: garantizar la compra sin riesgos ni pasivos ocultos.
De forma que no tengas que preocuparte de la negociación y redacción de contratos. Te acompañaremos a la firma de cuantos documentos sean necesarios.
La transparencia con nuestros clientes es una máxima en Legalki.
Por ello, disponemos de nuestra plataforma donde tendrás acceso en todo momento a todo el material relacionado con nuestro caso.
LEGALKI emitirá un presupuesto que alcanzará al 6% del valor de la empresa o unidad productiva conforme a valoración realizada en el proceso concursal, con un mínimo de 2.000 €.
En este precios no están incluidos los honorarios de otros profesionales que puedan ser necesarios como peritos, economistas, Procurador de los Tribunales etc.
Abogado especialista en el asesoramiento mercantil a empresas, principalmente a pymes. Sus áreas de práctica incluyen: asesoramiento societario recurrente, reestructuraciones y concurso de acreedores, asesoramiento contractual y en todo tipo de procesos judiciales de impugnación de acuerdos societarios, derivaciones de responsabilidad y reclamaciones judiciales en el ámbito mercantil.
Licenciado en Derecho por la U.P.V./E.H.U en el año 1996, completó su formación a través del MASTER EN ABOGACÍA de la Escuela Práctica Jurídica de Gipuzkoa en 1997, habiendo realizado una constante formación continua desde entonces en aquellos sectores relacionados con el mundo de la empresa, incluyendo aspectos novedosos como la mediación mercantil o la formación en Corporate Compliance.
Antes de incorporarse al equipo de Legalki ha sido administrador concursal desde el año 2.006 y mediador de conflictos desde el año 2012.
Cuentanos tu caso y hablamos en torno a él. Seguro que nos enriquece.
Absolutamente cierto. Las compras de unidades productivas de empresas en concurso se hacen por importes ventajosos. Resulta mucho más barato comprar una empresa que constituir y crear una nueva.
Realizando la compraventa de forma correcta la deuda con Hacienda muere en el concurso de acreedores y no se deriva a la nueva empresa. Es decir, que se compra libre de dicha deuda.
En este caso, nunca se paga la deuda con proveedores y acreedores ordinarios. El importe pagado por la adquisición se utiliza para abonarles sus créditos hasta donde alcance el capital. La nueva empresa no debe nada.
En relación a los trabajadores que no continúen en la empresa las indemnizaciones por despido deben ser pagadas por el comprador. Se puede hacer frente a dicha deuda mediante convenios de recuperación con el Fondo de Garantía Salarial.
La deuda con TGSS debe hacerse frente y se transmite a la nueva empresa, pero hay herramientas legales para negociar un aplazamiento y fraccionamiento de la deuda que facilitan la financiación de dicha deuda.
Los activos con prenda o hipoteca deben ser negociados con la entidad financiera, pudiendo normalmente alcanzarse acuerdos para refinanciar la compra.